Slaven Bilic en el London Stadium, donde se disputó el West Ham-Swansea (Dan Mullan/Getty Images Europe)
Pertenezco a una generación de aficionados que creció con la famosa película "Green Street Hooligans". Un largometraje que narraba la historia de un joven periodista que viaja a Londres para visitar a su hermana, con la consecuencia de coincidir con el hermano de su cuñado, quien es un ferviente seguidor del West Ham.
Una película que nos presentó la candente rivalidad entre West Ham y Milwall, y que, entre otras cosas, nos presentó uno de los cánticos más famosos del planeta fútbol, el conocido como "Pretty Bubbles in the Air" (Lindas pompas de jabón). Sí, en España fue uno de los pocos países donde se tradujeron los cánticos. Nada que ver con los originales. No, lo siento. ¿Decepción? Los aficionados del West Ham no cantan en español cada fin de semana. Pero gracias a esta película descubrimos la preciosa tradición que se vive en el estadio del equipo londinense, donde miles de pompas de jabón nacen y viven en el aire, creando un aura mágico, diferente, totalmente inesperado para un estadio de fútbol.
Siempre, cada fin de semana en el que el West Ham juega como local. Antes en Upton Park. Ahora en el London Stadium. Frente al Swansea, los Hammers vivieron el éxtasis de un gol que da la victoria sobre la bocina para vencer 1-0 al equipo galés. Una fiesta que, también, fue celebrada con las famosas pompas de jabón. Una fiesta que, sobre la bocina, puede haber dado oxígeno a Slaven Bilic, quien ha sonado como futurible para dejar el puesto de entrenador por el mal rendimiento del equipo en este inicio liguero.